Trump planea otra guerra comercial con aranceles del 25% a los vehículos extranjeros
Los automóviles procedentes del viejo continente podrían tener sus días contados al otro lado del charco. La agencia de calificación de riesgos, Moody’s, ha pronosticado un impacto de 440.000 millones de euros a nivel global por la posible imposición de aranceles de hasta el 25% que Estados Unidos estaría planeando cargar a las automóviles extranjeros.
Según el informe, publicado hoy por la compañía financiera, de implementarse dichas tasas habría “medidas de represalia” por parte de los principales socios comerciales del país, como Alemania, Japón o Francia. El conflicto arancelario con China es considerado uno de los elementos clave de la desaceleración económica mundial, por lo que una nueva guerra comercial podría tener efectos catastróficos en el escenario internacional.
De acuerdo a sus cálculos, los 440.000 millones de euros que podrían perderse representan el el 0,6% del PIB mundial. Por ello, Moody’s apuntó que las consecuencias económicas de esos posibles gravámenes serían “significativas”, ya que esas sanciones a los automóviles “perjudicarán a la economía mundial” al distorsionar los precios y crear ineficiencias.
El ritmo, ya de por sí debilitado de la expansión global, aumentaría las presiones sobre el crecimiento global, causando un impacto catastrófico en la confianza de las empresas y de los consumidores en medio de unas condiciones financieras más restrictivas.
Estos datos salen a la luz después de que el Departamento de Comercio estadounidense enviase recientemente un documento a la Casa Blanca sobre cómo proceder para imponer estos aranceles de hasta el 25%. La industria automovilística de EE UU reaccionó este lunes a las recomendaciones y pidió a su presidente, Donald Trump, que tenga en cuenta al sector privado antes de tomar una decisión al respecto.
La Asociación de Fabricantes de Motor y Equipo estadounidense advirtió en un comunicado de “lo fundamental” que es para la industria que se revisen las recomendaciones y se asesore a la Casa Blanca sobre cómo los aranceles propuestos pondrán “empleos en riesgo”, impactarán en los consumidores y provocarán “una reducción de las inversiones en EE UU que nos llevará décadas atrás”.
El año pasado, Trump ordenó al Departamento de Comercio investigar las importaciones de automóviles, incluyendo camiones y piezas, para determinar sus efectos en la seguridad nacional de EE UU. Asimismo, contempló imponer aranceles de hasta el 25% a las importaciones de vehículos y componentes. Desde entonces, patronales, Gobiernos e instituciones económicas alrededor del mundo se han mostrado contrarios a esta medida por el devastador impacto en la economía global.
Source: The PPP Economy