Ryanair abre la puerta a un recorte de plantilla por las huelgas
Desde que meses atrás comenzaron las movilizaciones de sus tripulantes de cabina (TCP) en algunos países de Europa, incluido España, Ryanair venía avisando de que las movilizaciones podrían desembocar en recortes en la aerolínea. Y la advertencia se ha transformado en certeza. La compañía irlandesa de bajo coste ha anunciado esta mañana que va a reducir un 1% su capacidad en la campaña de invierno por, entre otros motivos, las huelgas de sus TCP, lo que afectará a su plantilla. La aerolínea ha anunciado el cierre de sus bases en Eindhoven (Holanda), y Bremen (Alemania). También reducirá de cinco a tres las aeronaves que tiene basadas en Niederrhein (Alemania). Para “minimizar” la pérdida de empleos, Ryanair ha anunciado que ofrecerá traslados a otras bases a sus empleados. No obstante, también ha advertido de que tiene “excedente” de tripulantes de cabina para el invierno, por lo que explorará permisos remunerados sin descartar “otras opciones”.
Ryanair prevé un cierre de año complicado y un 2019 también difícil. La compañía ha rebajado en un 12% sus previsiones de beneficios para el año próximo, que espera cerrar con unas ganancias de entre 1.100 y 1.200 millones de euros, frente a la horquilla estimada inicialmente de entre 1.250 y 1.350 millones de euros. En una nota a los medios, Ryanair justifica esta actualización de sus estimaciones ante la caída del tráfico aéreo provocada por las huelgas y a un descenso de las tarifas mayor de los previsto. En concreto, en el tercer trimestre, finalizado en septiembre, cayeron un 3% frente al descenso estimado del 1%, debido a las huelgas. De cara a la mitad de su ejercicio, calcula una caída del 2% de las tarifas.
Ryanair admite que las huelgas de sus tripulantes de cabina en en Italia, Portugal, España, Holanda, Bélgica y Alemania y de pilotos en algunos de estos países han provocado un descenso de sus ingresos y de sus reservas anticipadas por “una pérdida de confianza” de los pasajeros ante el temor de nuevas huelgas. Los sindicatos amenazan con paros de 24 horas cada mes si no se atienden sus demandas. Los beneficios de la aerolínea también resultarán afectados por el coste de las compensaciones a los pasajeros y por el aumento del 10% en los precios del carburante (en base a 82 dólares el barril). La compañía estima que su factura de combustible ascienda a 460 millones de euros, casi un 7% más que sus estimaciones anteriores.
Source: The PPP Economy