La última reforma laboral ha colaborado al ritmo de descenso del paro


El mes de Noviembre no suele ser bueno para el empleo y sin embargo este año el paro registrado ha descendido en 27.071 parados, un buen dato que hay que valorar, teniendo en cuenta que a medida que las expectativas mejoran hay más personas que se apuntan a las listas del paro. Esta realidad es un reflejo más de una tendencia de crecimiento económico que a final de año se va a consolidar por encima del 3%. Era difícil prever la capacidad de respuesta de la economía española en tan sólo un año, pero la mejora de la confianza del consumidor y las expectativas positivas de los inversores, han puesto en marcha un círculo virtuoso que se alimenta a sí mismo y se plasma en un crecimiento del consumo y de la inversión privada. Hay que mantener la senda del crecimiento y la generación de empleo y los datos de estos dos últimos años confirman que así está sucediendo. Hay que resaltar que mientras el sector servicios incrementa el número de parados, el sector de la Construcción y el sector Industrial, que constituyen la base estable de la economía mientras se mantengan en niveles adecuados, son los que aportan mejores números en los datos de noviembre. El descenso del paro en lo que llevamos de año supera los 350.000 parados y el ritmo medio se mantiene en un tono muy alto. El porcentaje de contratos indefinidos (entre 74 y 75%) es superior al de 2008 (70%) y los contratos temporales en consecuencia, descienden del 30 al 25%.

Resulta sorprendente la obsesión de algunos partidos políticos de minimizar estos resultados e incluso de plantear la derogación de la última reforma laboral, que en línea con las reformas anteriores de acercarnos al modelo europeo de flexibilidad, ha colaborado de manera importante al ritmo de descenso del paro. Todos estos datos objetivos deben servir para felicitarnos y para mantener vivo el esfuerzo para mejorar aún más.

*Profesor del IESE y experto en relaciones laborales

Source: The PPP Economy

GrupoUnetcom