La gran industria critica con dureza el fondo de sostenibilidad eléctrico creado por el Gobierno
La Alianza por la Competitividad de la Industria Española, constituida por Anfac (automoción), AOP (refino), Aspapel (papel), Feique (química y farmacia), FIAB (alimentación y bebidas), Oficemen (cemento) y Unesid (siderurgia) ha denunciado hoy que la creación del Fondo Nacional para la Sostenibilidad del Sistema Eléctrico (FNSSE), que se encuentra a la espera de dictamen por el Consejo de Estado, puede «agravar la situación de la industria española y poner en riesgo su futuro», afirman en un manifiesto firmado por los representantes de las asociaciones.
El objetivo de ese Fondo es sacar de la factura de la luz los aproximadamente 7.000 millones de euros que anualmente cuestan la retribución a las renovables, cogeneración y residuos (Recore), cifra que será asumida por todas las empresas energéticas con actividad en España.
En el caso de su puesta en marcha, el coste acumulado para la industria entre 2021 y 2025 ascendería a unos 2.650 millones de euros, sin tener en cuenta el eventual régimen de compensaciones, explican en el manifiesto. Este impacto lo asumirían sobre todo las industrias consumidoras de gas y los consumidores industriales medios e intensivos de electricidad, al eliminarse las metodologías de niveles de tensión.
Así, la Alianza por la Competitividad de la Industria alerta de que el sector industrial ya se enfrenta actualmente a un extraordinario incremento de los costes del gas y la electricidad en nuestro país. Este aumento adicional de los costes a medio plazo dificultaría gravemente el contexto de recuperación de la crisis económica y se pondría así en riesgo el desarrollo y futuro del sector industrial español. «El impacto previsto de la iniciativa legislativa, tal y como está configurada, es lesivo para la actividad económica responsable de la generación del empleo de calidad (en términos de salario y contratación indefinida), del desarrollo de la innovación y tecnologías avanzadas y neutras en carbono, y de la internacionalización de nuestro tejido empresarial», aseguraron las asociaciones
Y añade que, «en el momento actual de transformación en el que se encuentra la industria, hay que evitar medidas que afecten al nivel de competitividad de la industria productiva española, responsable de generar el 13% del PIB y el 12% del empleo de forma directa y que llega al 43% del PIB y el 30% del empleo si se suman sus efectos indirectos».
Por todo ello, la Alianza considera que la industria española cree positivo que se extraigan los ‘costes impropios’ del conjunto de los costes regulados del sistema eléctrico puesto que redundará en la reducción del precio final para consumidores domésticos e industriales. Asimismo, la puesta en marcha del FNSSE puede afectar directamente a la competitividad de la actividad industrial en un momento crítico enfocado en la recuperación y en la atracción de inversión y nuevos proyectos.
Por eso, se solicita que el coste del Recore sea trasladado íntegramente a los Presupuestos del Estado de manera progresiva para paliar el impacto en un solo ejercicio en los actuales presupuestos. En caso de no ser considerado el traslado del coste a los Presupuestos, debería excluirse o establecerse exenciones completas para los sectores industriales que, aún no siendo consumidores intensivos, son sectores tractores, esenciales o exportadores, indispensables para generar crecimiento económico y de empleo de calidad.