La eurozona frena su crecimiento en el primer trimestre
La economía de la eurozona creció un 0,4 % entre enero y marzo de 2018 con respecto al trimestre previo, lo que supone una ralentización frente a la fuerte expansión registrada al final de 2017, según los primeros datos difundidos hoy por la oficina de estadística comunitaria, Eurostat.
En el cuarto trimestre de 2017, el PIB de la eurozona había crecido un 0,7 %.
En el conjunto de la Unión Europea (UE), el crecimiento entre enero y marzo fue también del 0,4 % en comparación con el trimestre anterior, cuando había registrado un incremento del 0,6 %.
Si se compara con el primer trimestre de 2017, el PIB creció un 2,5 % en la eurozona y un 2,4 % en la UE entre enero y marzo de este año.
En el trimestre anterior, el crecimiento interanual había sido del 2,8 % en el área del euro y del 2,7 % en los Veintiocho.
La economía de la eurozona modera así su ritmo de crecimiento tras la importante expansión registrada en 2017, cuando el PIB llegó a crecer un 2,3 % en el conjunto del año después de registrar incrementos del 0,6 % en el primer trimestre y del 0,7 % en los trimestres restantes.
La misma tendencia se observa en el conjunto de la Unión Europea, dónde el crecimiento fue del 2,4 % en 2017 y se registraron en todos los trimestres incrementos superiores al 0,4 % anotado al inicio de este año.
En concreto, el PIB aumentó un 0,6 % en el primer trimestre de 2017, un 0,7 % en el segundo y tercero, y un 0,6 % en el último.
Los datos, de confirmarse una vez se publiquen las cifras revisadas el 15 de mayo, respaldan lo anticipado por el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, que la semana pasada advirtió de que se está dando «alguna moderación» en el crecimiento de la zona del euro.
Esta «pérdida de ímpetu», dijo, se ha visto en todos los países del área del euro y en todos los sectores de la economía: los servicios, la manufactura, la construcción, la producción de bienes de capital o los indicadores de confianza.
Detrás de la ralentización estarían, según el presidente del BCE, «factores temporales» como el clima, las huelgas o el adelanto de las vacaciones de Pascua, aunque también se esperaba una cierta normalización tras la fuerte expansión de 2017.
Por otra parte, la retórica proteccionista de Estados Unidos -que ayer anunció que prolongaba solo por un mes la exención a los aranceles al acero y al aluminio para la Unión Europea- juega en contra de la mejora de la confianza en la eurozona.
Con todo, el crecimiento en el área del euro sigue siendo robusto, con una base amplia y en cotas por encima de la media.
La Comisión Europea presentará mañana nuevas previsiones de crecimiento para la eurozona y la UE, pero según su última estimación publicada en febrero, el crecimiento en los países de la moneda única se mantendrá en el 2,3 % este año mientras que se reducirá al 2 % el que viene.
El Fondo Monetario Internacional también prevé que el crecimiento se suavice en los próximos dos años: calcula que el PIB del área del euro aumentará un 2,4 % en 2018 y un 2 % en 2019, según sus estimaciones más recientes emitidas en abril.
En todo caso, el crecimiento en términos interanuales en el primer trimestre del año en la eurozona (2,5 %) y la UE (2,4 %) fue superior al registrado en Estados Unidos, cuya economía creció un 2,3 % entre enero y marzo de 2018 con respecto al mismo periodo del año previo.
Sin embargo, las cifras europeas están lejos de las de China, donde el PIB aumentó un 6,8 % interanual en el primer trimestre.
Eurostat publicará datos revisados y por países del PIB el próximo 15 de mayo y el 7 de junio revelará los datos agregados y por componentes. EFE
Source: The PPP Economy