El neuromarketing da un paso más allá con los algoritmos
¿Cómo saben los equipos de marketing qué gusta y qué no? ¿Qué miran los usuarios? ¿Qué los mueve? Para saberlo existen distintas metodologías, y una de las más llamativas es la que realiza un seguimiento ocular de adónde se dirige la mirada del usuario y qué microexpresiones se generan en cada momento. En eso se centra Decoditive. Esta startup ofrece dos servicios principales enfocados en el neuromarketing y la inteligencia artificial, uno basado en hechos y uno predictivo. El objetivo de ambos, aunque con metodologías distintas, es averiguar en qué se fija la gente cuando consume algún formato, bien sea una página web, un vídeo o un cartel.
«Si, por ejemplo, enseñamos a un grupo de personas un anuncio de TV o hacemos una experiencia de usuario a través de una página, nuestra tecnología permite a través de la webcam hacer un seguimiento de ojos para saber exactamente en qué se están fijando en cada momento, y también les analizamos las emociones, cómo se están sintiendo para saber qué partes del vídeo encajan más con lo que quiere transmitir la empresa», explica Joan Buch, CEO y fundador de la compañía. El servicio predictivo, en cambio, funciona a través de «una inteligencia artificial que ha sido entrenada con muchos datos y que es capaz de predecir el comportamiento del ojo humano frente a un estímulo», comparte el CEO. Además, también son capaces de anticipar «en qué se van a fijar, en qué no, si hay algunos puntos muertos… también podemos calcular qué porcentaje de personas se van a fijar en un parte, qué porcentaje en otra».
La tecnología analiza cada reacción del usuarioLa empresa, fundada en julio de 2020, nació con un propósito muy diferente al actual pero con la misma tecnología: en sus comienzos se planteó como una plataforma para torneos de ajedrez con apuestas «como los de póker», comenta Buch. Después, y porque se dieron cuenta de «que les hacían trampa en los torneos», empezaron a experimentar con la inteligencia artificial y pivotaron a «un sistema anti trampas para torneos de ajedrez online». Sin embargo, el nicho del ajedrez le quedaba un poco pequeño a esta empresa, y con la tecnología ya desarrollada decidieron enfocarse al neuromarketing desde abril de 2021.
La empresa funciona con un modelo de negocio de pago por servicio, ya que desean «aprender muy bien de los primeros clientes exactamente qué necesidades tienen y qué problemas resolvemos mejor». Sin embargo, la startup tiene también otros planes: «Nuestra visión es llegar a convertirnos en un SaaS, que es mucho más escalable», expresa el CEO.