El Gobierno mantiene el bono social a las familias numerosas
El Gobierno desveló ayer los detalles del nuevo modelo del bono social, el descuento en el precio de la electricidad al que pueden acogerse los consumidores más «vulnerables». Una sentencia del Tribunal Supremo del pasado mes de octubre obligó a reformar el sistema, subvencionado inicialmente por las eléctricas generadoras (Iberdrola, Endesa y Gas Natural Fenosa sobre todo), para que también paguen las más de 200 comercializadoras que operan en España. Aprovechando esa circunstancia, el Ejecutivo ha reformado también los requisitos para acceder a esta ayuda. Se vincula en la mayor parte de los casos con una renta máxima y se establecen límites de consumo anual sobre los que se aplicará el descuento.
Aunque se especulaba con la posibilidad de que se eliminase el descuento del 25% en la factura de la luz para las familias numerosas (con tres o más hijos), finalmente el Gobierno ha optado por mantener la ayuda para estas familias. Aunque podrán beneficiarse todas, con independencia de sus ingresos, habrá un límite de 3.600 kW al año por hogar. A partir de esta cifra, la electricidad se facturará a la tarifa normal. De los 2.395.844 hogares acogidos al bono social al cierre de 2016, el 9,4% (225.114) eran familias numerosas. Estos usuarios tuvieron un consumo medio de 3.852 kW el año pasado, lo que significa que el 7% de su factura se quedaría sin descuento. Para un consumo medio de 100 euros al mes, el perjuicio sería de 1,75 euros.
También se imponen límites para el resto de categorías beneficiarias. «No se van a financiar lujos. Un consumo normal de una familia normal. El bono social es para niveles de consumo habituales», dijo ayer en el Congreso el ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, Alvaro Nadal. «No se va a poner el bono social para calentar la piscina climatizada, por poner un ejemplo un tanto absurdo», afirmó Nadal.
Para el Ministerio, la reforma, cuyo borrador se envió ayer a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), establece «un mecanismo de acceso al bono social más eficiente, basado en criterios de renta de unidad familiar, para que sea más accesible a quienes más lo necesitan». En categoría de consumidores vulnerables (25% de descuento) se encuentran, además de las familias numerosas, los hogares con una renta anual menor a 18.638 euros (con dos menores a cargo), 14.910 euros (un menor a cargo) y 11.183 euros (sin menores a cargo). Estos umbrales de renta se incrementarán en 0,5 veces el IPREM (3.727 euros al año) para las víctimas de violencia de género, víctimas del terrorismo y para hogares con algún miembro con discapacidad superior al 33%. También podrán acogerse al bono social los hogares en los que uno de sus miembros sea pensionista por jubilación o incapacidad permanente, percibiendo la cuantía mínima (entre 8.470 y 11.013 euros al año).
Se crea la nueva categoría de «vulnerables severos» (renta inferior al 50% de los umbrales para consumidores vulnerables), que tendrán un 40% de descuento. Además, no se podrá cortar la luz a los consumidores en riesgo de exclusión social, que serán aquellos consumidores vulnerables severos que estén siendo atendidos por los servicios sociales de comunidades o ayuntamientos.
Source: The PPP Economy