El Gobierno limita a 2.000 euros las quitas que el Estado podrá conceder a empresas en quiebra
Nueve de cada diez empresas que entran en quiebra en España terminan desapareciendo del mapa, o, mejor dicho, terminan en una fase de liquidación que puede prolongarse durante años hasta que se venden todos sus activos y los acreedores cobran la parte de sus deudas pendientes que les corresponde. Profesionales y organismos internacionales llevan años denunciando esta situación y señalando como una de las causas de la ineficacia del procedimiento concursal español a la hora de dar una salida de viabilidad a las empresas el hecho de que los acreedores públicos, principalmente la Agencia Tributaria y la Seguridad Social, no renuncien a un solo euro de las cuentas pendientes que mantienen con empresas en problemas.
Muchos confiaban en que el proyecto de reforma concursal del Gobierno acabara al fin con los privilegios de los acreedores públicos en los procesos concursales, pero las expectativas se vieron defraudadas en cuando se vio que el anteproyecto inicial presentado el pasado verano preservaba ese blindaje. La presión ambiental, no obstante, ha surtido efecto y la ministra de Justicia, Pilar Llop, ha anunciado este martes en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que el proyecto de ley de reforma concursal que el Gobierno enviará al Congreso de los Diputados recogerá la posibilidad de que los acreedores públicos puedan renunciar hasta a 2.000 euros de las deudas que empresas incursas en un procedimiento concursal mantengan con Hacienda o con la Tesorería General de Seguridad Social.
Según la explicación proporcionada por la ministra, la norma planteada por el Gobierno permitirá que la Agencia Tributaria realice quitas de hasta 1.000 euros a las empresas o particulares que se hayan declarado en quiebra y reconocerá el mismo margen de maniobra a la Tesorería General de la Seguridad Social, lo que llevará hasta los 2.000 euros la cuantía del crédito público que se podrá incluir en las quitas de los acreedores.