El futuro ya está al alcance de la mano


Tanto la transformación digital como los avances tecnológicos y su implantación en la empresa, desde el ‘big data’ al ‘blockchain’, forman parte de los planes de los planes de negocio de la compañías especializadas en fondos de inversión. No solo por el interés en formar parte del desarrollo de las empresas de corte tecnológico, sino en la propia evolución del trabajo de los gestores, como destaca Araceli de Frutos Casado (Araceli de Frutos EAF y asesora de Alhaja Inversiones): «La transformación digital de las gestoras en los procesos de comercialización de fondos hacen más cómoda y fácil la contratación. Un ámbito potenciado con la pandemia».

La automatización de procesos, una tendencia presente en todos los sectores de la economía, también se va introduciendo como elemento competitivo en la industria de la inversión. Los gestores automatizados o ‘roboadvisors’ pueden ayudar a determinar el perfil de riesgo de un cliente e incluso los algoritmos pueden ayudar en la toma de decisiones. Pero siempre será el asesoramiento del gestor el que consiga marcar difencias.

Apuesta decidida

El futuro ya es presente, y los gestores lo tienen claro. Los medios especializados han difundido casos emblemáticos como los de Catherine Wood, directora de inversiones en la compañía que fundó: ARK Investment Management LLC, con hitos como su gestión de los fondos de inversión de Tesla, que aumentaron significativamente su valor durante la pandemia. Una compañía que basa su actividad en aspectos como el internet de nueva generación, las ‘fintech’ o la tecnología robótica, con acciones de inversión en otras opciones como Zoom, Spotify o la plataforma de comercio de criptomonedas Coinbase. Siempre, con la inteligencia artificial de fondo, un excepcional fenómeno tecnológico que no ha hecho más que empezar a sorprendernos.

La inteligencia artificial puede ser una ventaja competitiva en el día a día de las gestoras

En el caso de Morning Star, firma estadounidense especializada en servicios de investigación y gestión de inversiones, su analista Brian Colello destaca cómo las empresas especializadas en hardware y software se mantienen en lo más alto de las estimaciones, «y somos aún optimistas en todo lo relacionado con la ‘nube’, 5G y el Internet de las Cosas». El «Morningstar US Technology Index» apunta a un 38,8% de incremento interanual, apoyado en compañías que trabajan, por ejemplo, con semiconductores (materiales fundamentales en los procesos tecnológicos).

La digitalización acelerada de la economía y el impulso a la transformación tecnológica que se ha producido tras la pandemia ha conseguido que los fondos RV Sector Tecnología (fondos que invierten, sobre todo, en empresas de ‘hardware’ y ‘software’) hayan subido durante este año, por termino medio, más de un 13%. Una tendencia, la disrupción tecnológica, ya apuntada recientemente por Leonardo Fernández, director del canal intermediario de Schroders en el encuentro digital ABC-Funds Society Live (’El nuevo paradigma para integrar el futuro de las carteras’): «Lo principal es seleccionar tendencias que tengan durabilidad en el tiempo, que no sean modas, y en las que vayamos a estar hasta diez años para sacar su mejor provecho», aconsejó a aquellos inversores interesados en estos fondos temáticos de gestión activa.

Los fondos RV Sector Tecnología han subido este año más de un 13% de media

Para sacar todo el partido a la revolución tecnológica en marcha, Luis Gasca, analista financiero y profesor del CEF, destaca que hay que ser «poco impulsivos y un poco visionarios». «No se trata de escoger un fondo en el que se invierte solo en tecnología (también), sino que aproveche el proceso de disrupción de la economía que se produce en distintos sectores como en el de la medicina, comercio, medio ambiente… economía disruptiva, basada en los cambios súbitos y rápidos que se están produciendo en los distintos sectores de la economía. Todo lleva a la transformación de las industrias o sectores tradicionales», subraya este experto. Será necesario, por lo tanto, «que los inversores adopten una visión de largo plazo y se enfoquen en empresas que presenten una cultura de innovación, equipos directivos competentes y disciplinados y otros atributos importantes para materializar un crecimiento duradero y cualitativo», puntualiza el profesor del CEF.

Toda una actividad que se refleja en grandes compañías, pero también en pymes y en pujantes e innovadoras startups como las que figuran en el BME Growth (el anteriormente Mercado Alternativo Bursátil). El futuro está alcance de la mano.

Source: Noticias

GrupoUnetcom