Cómo hacer frente económicamente a la vuelta al cole


Con el mes de septiembre llega la vuelta al colegio de los niños y la temida cuesta de septiembre para los padres. Porque después de haber realizado un desembolso extra durante las vacaciones llega una época donde el gasto se acumula.

Los libros, material escolar, ropa, calzado, matrículas y las actividades extraescolares representará un gran coste para las familias que se acentúa en hogares donde hay mayor número de niños. Por ello, hacer frente económicamente a estos gastos supone un gran dolor de cabeza para la mayoría de padres que tendrán que hacer un esfuerzo extra en un mes donde habrá que hacer malabarismos para llegar al día 31 con liquidez en la cuenta corriente.

Según un estudio elaborado por el Observatorio Cetelem, las familias españolas gastarán una media de 239 euros en la vuelta al cole y tendrán una intención de compra superior al 3% con respecto al año pasado. Estos gastos también dependen de las distintas Comunidades Autónomas, mientras en Madrid, en Cataluña y la Comunidad Valenciana cada familia se dejará cerca de 1.000 euros por hijo en otras, como La Rioja, Canarias o Galicia, no se alcanzarán los 800 euros por niño. Según los datos de este estudio, el 59% de las 1.000 personas encuestados esperan gastar lo mismo del año pasado, el 26% invertirán más dinero con respecto a 2016 y el 14% esperan desembolsar menos dinero.

Establecer un presupuesto inicial debe ser la principal premisa de toda familia para que la cuesta de septiembre sea menos dolorosa. En el mismo se deben establecer los gastos fijos e ingresos del mes. A día de hoy, internet pone a tu disposición numerosas plantillas donde puedes elaborar tu presupuesto de una forma profesional con el objetivo que tu balance quede lo más claro posible.

Una vez elaborado tu hoja de gastos es imprescindible adelantarse para encontrar el mayor número de ofertas que haya en el mercado. Eso sí, antes se deben comparar todos los precios para comprobar que estás comprando el producto que deseas al mejor precio posible. A medida que pasan los años están subiendo como la espuma las compras online, que se caracterizan por sus precios más bajos y por la velocidad en el envío.

Para intentar combatir la cuesta de septiembre, también han aparecido muchas plataformas de intercambio online donde se pueden cambiar multitud de materiales o ropa y los temidos libros de texto, que supone la mayor inversión para las familias ya que cada uno cuesta unos 30 euros de media. Por ello, también es recomendable solicitar becas, ayudas y subvenciones que, dependiendo de cada Comunidad Autónoma, pueden sufragar una gran parte de los gastos.

Otra de los remedios para hacer frente económicamente a la vuelta al cole son los créditos rápidos y préstamos online, que cada año están adquiriendo más importancia y están en auge en España. En estos últimos años han movido en torno a los 200 millones de euros, además de contar con un índice de aprobación del 50 % en las solicitudes presentadas por consumidores e inversores, superando así a las entidades bancarias.

Y, ¿por qué el sector de los créditos rápidos está subiendo como la espuma? Principalmente por todas las ventajas que ofrecen a los clientes entre las que están su rapidez a la hora de entregar el dinero y que para solicitar este tipo de servicio no tienes que hacer ninguna justificación.

Porque lo de sentarse con el responsable de una entidad bancaria y presentar diversos justificantes es pasado. En pleno siglo XXI se puede pedir un préstamo sin nómina. Este tipo de entidades no realizan una labor de investigación y análisis de tu liquidez tan exhaustiva como la que pueda realizar un banco. En las empresas que ofrecen créditos online a través de internet sólo tienes que registrarte, solicitar una determinada cantidad de dinero (la primera vez que se utiliza el cliente no puede superar los 1.000 euros), indicar la fecha a devolver que suele ser entre un mes o dos, y cuando la petición sea aceptada en menos de 24 horas tu dinero estará en tu bolsillo.

El principal objetivo de estos préstamos es que el cliente obtenga una pequeña cantidad de dinero para salir adelante ante un gasto determinado, como puede ser el pago del distinto material escolar. Hay que tener en cuenta que estos créditos sirven para hacer un pago no muy elevado y que se debe tener un consumo responsable.

Según datos proporcionados por el INE (Instituto Nacional de Estadística), el grupo de edad que más pide este tipo de préstamos personales son los hombres con edades comprendidas entre 30 y 65 años (alrededor de un 40% del total). Sin embargo, con el paso de los años está decreciendo la edad media por la gran proliferación de empresas de este sector que están apareciendo recientemente. Respecto al porcentaje de hombres/mujeres que piden acceso a estas líneas de crédito, es favorable 70%-30% a los primeros, normalmente porque son la cabeza visible del núcleo familiar.

Source: The PPP Economy

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