Clase media, el pilar del crecimiento


Antonio descorcha un vino tinto peleón. Echa una copa a Toni, mientras Merche sirve unos platos de paella que hace apenas media hora preparó Herminia. Carlitos irrumpe en la conversación, contando sus aventuras en Sagrillas. Están sentados alrededor de una mesa, frente a un televisor. La familia Alcántara constituye el prototipo de la clase media española durante la Transición. Y su declive, como consecuencia de sus líos con el fisco, coincide con el del que hasta la fecha ha sido el grupo social mayoritario en España.

«En todas las sociedades avanzadas, la creación de la clase media consolidó el crecimiento económico y el progreso». Javier Santacruz, profesor del IEB, opina que este colectivo es, ante todo, un grupo social cuya renta disponible crece a un ritmo estable. Por tanto, supone una demanda constante y creciente.

Las estrategias de las empresas siempre están encaminadas hacia ella, ya que es la que absorbe sus productos o servicios con unos patrones de conducta previsibles. «La clase media es la que mejor representa a un país. Así, si ésta progresa, lo hace el conjunto de la sociedad». De igual modo, cuando sus integrantes tienen niveles educativos superiores suelen ser la base de la innovación, el emprendimiento y las instituciones favorables al crecimiento, así como una fuente de las libertades individuales.

La caída de la clase media ha disparado las alarmas. Se trata del estamento social que fundamenta el progreso económico, además del grupo cuyos integrantes desarrollan los trabajos vitales para la supervivencia diaria de una sociedad. Es el colectivo, por volumen, que más consume, lo que eleva los incentivos para invertir, y la inversión es la base del crecimiento.

Source: The PPP Economy

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