Carburantes hasta 40 céntimos más caros según la gasolinera
Desde hace años, el Gobierno y la Comisión Nacional de la Competencia (CNMC) albergan sospechas sobre pactos de precios en el sector de los carburantes. Creen que hay poca competencia y que las grandes petroleras manejan por ello el mercado a su antojo. La realidad del estudio de los precios que se ofrece en las alrededor de 9.800 estaciones de servicio españolas no refleja, sin embargo, un mercado ni mucho menos uniforme. Aquellos que se van de vacaciones de Semana Santa en coche no gastarán ni mucho menos lo mismo para repostar. Entre las gasolineras más caras y las más baratas, hay diferencias en los precios de los carburantes de hasta 40 céntimos, según los datos oficiales mostrados en el Geoportal de Hidrocarburos del Ministerio de Industria. Eso sí, ninguna de las 30 estaciones de servicio que ofrecían los precios más baratos tanto de gasolina como de diésel pertenecían a alguna de las tres grandes compañías –Repsol, BP o Cepsa– que dominan el mercado español.
Misma brecha
El diferencial de precios es prácticamente idéntico tanto para la gasolina como para el gasóleo. En el caso del diésel, el precio más barato al mediodía de ayer lo ofrecía la gasolinera Agropecuaria de Fraga (Huesca), con 80 céntimos por litro, casi idéntico al ofrecido en Norpetrol, una gasolinera ubicada en el polígono industrial La Portalada de Logroño. En el extremo contrario se situaba la estación de servicio Iberdoex, en Mérida, donde repostar gasoil costaba 1,19 euros el litro. Ayer había 4.679 gasolineras con el precio del diésel por debajo del euro el litro. Contando las de Ceuta y Melilla, Las Palmas y Tenerife, su número era de 5.128. Llenar el depósito de diésel por menos de 90 céntimos sólo era posible en 633 gasolineras de la península.
En el caso de la gasolina, la antes citada Norpretrol era la más asequible para repostar. Su precio era de 0,939 euros el litro. Otra estación de servicio situada en la capital riojana, Gmoil, ofrecía los segundos precios más económicos, 0,944 euros el litro. La gasolinera más cara era la de Repsol ubicada en la localidad burgalesa de Villalbilla de Burgos, donde el precio de la gasolina era de 1,329 euros el litro. La siguiente en la clasificación era la de Campsa ubicada en la calle Ancora de Madrid. Allí, el precio de la gasolina era de 1,289 euros el litro.
Menos de un euro
En el caso de la gasolina, sólo era posible llenar el depósito por menos de un euro en 82 gasolineras de la península. Si se incluyen las de Ceuta, Melilla, Las Palmas y Tenerife, son 531 en total.
Esta semana, los precios de los carburantes han proseguido con la escalada que iniciaron hace ya más de un mes. El gasóleo se ha encarecido un 0,67% con respecto a la pasada semana, su quinta subida consecutiva, y la gasolina un 1%, con lo que encadena tres subidas, según los datos publicados ayer por el Boletín Petrolero de la UE. Aunque esta estadística ofrece precios medios, es válida para comprobar tendencias.
Según este boletín, el precio medio de la gasolina se situó en 1,116 euros, frente a los 1,104 euros de la semana pasada. En el caso del gasóleo, escaló hasta los 0,978 euros, frente a los 0,971 euros del periodo víspera de Semana Santa.
La subida de los precios se produce en un entorno de estabilización de precios del petróleo. Ayer, el barril de crudo Brent, el de referencia en Europa, fluctuaba entre los 40 y los 41 dólares. Aunque se trate de la materia prima de los carburantes y los determine en buena medida, sus precios dependen de su cotización en el mercado mayorista.
A pesar de esta subida, llenar el depósito sigue siendo más barato que en el mismo periodo vacacional de 2015. Llenar un depósito tipo de 55 litros de gasóleo cuesta ahora 53,7 euros, frente a los 63,58 euros que costaba hace un año. Repostar la misma cantidad de gasolina cuesta 61,38 euros, frente a los 69,6 del ejercicio pasado.
Los incrementos registrados en el último mes no han impulsado los precios de los carburantes en España por encima de la media europea. En la Unión Europea, el precio medio de la gasolina es de 1,249 euros, mientras que el del gasóleo es de 1,089 euros. La razón de esta diferencia es que la fiscalidad en España es mucho más baja que en el resto de Europa a pesar de las subidas impositivas de los últimos años. No obstante, el grueso del precio que los consumidores pagan por los carburantes sigue siendo achacable a los impuestos. Por cada 50 euros que se repostan, 29 van destinados a tasas, 12 a sufragar la materia prima, ocho los costes de logística y comercialización y sólo uno corresponde al beneficio bruto del mayorista, según los datos que ofrece la Asociación Española de Operadores de Productos Petrolíferos (AOP).
Source: The PPP Economy