Aquí no hay quien viva


Los españoles andamos preocupados principalmente por dos asuntos: la corrupción política y el paro. Al menos así lo refleja el último Barómetro del CIS correspondiente al mes de mayo. Sin embargo, al margen de que estas preocupaciones sean bien ciertas, hay otra cosa que nos ronda a muchos y que no sale en los estudios del CIS. El precio de la vivienda en sus múltiples formas y colores sale en todas las conversaciones, las sesudas y las de barra de bar. Sube el alquiler de forma estratosférica (2017 cerró con el mayor incremento de los últimos once años), sube el precios de la vivienda nueva, de segunda mano, de segunda residencia… Es un hecho constatable y demostrado, culpable de muchas noches de insomnio y, al menos por ahora, no parece centrar el debate político, distraído entre censuras y dimisiones.

El mercado de la vivienda en España va dando bandazos al ritmo de los tiempos económicos. En este momento, el 66% de los ciudadanos mayores de 18 años cuenta con una casa a su nombre y el 31% de los jóvenes entre los 25 y los 34 años planea adquirir una en los próximos cinco años, según el informe anual que acaba de publicar Fotocasa.

Si nos comparamos con nuestros vecinos de la Unión Europea, los últimos datos dados a conocer por Eurostat revelan que estamos a la cabeza en cuanto al porcentaje de viviendas en propiedad. Solo nos superan Rumanía, Croacia y Noruega, lo que refuerza la tesis tradicional de que en España la filosofía de que pagar un alquiler significa «tirar el dinero» sigue teniendo fuerza.

No cabe duda de que la dificultad de encontrar vivienda unida a los elevados datos del paro forman la tormenta perfecta para otro de los datos que hemos conocido esta semana. Los jóvenes españoles son de los que más tardan en la UE en dejar el nido familiar. La media es de 29,3 años frente a los 21 de los suecos y los 26 de la media comunitaria.

Este panorama es bastante poco alentador si echamos un vistazo a las perspectivas para este año. Se espera que en 2018 la vivienda de segunda mano experimente una subida del 10%, una cifra delirante que también se extiende al alquiler.

Source: The PPP Economy

GrupoUnetcom