"A las pymes españolas no les está llegando el mensaje de la necesidad de la digitalización"


Es una gran conocedora del mapa empresarial y del desarrollo tecnológico de nuestro país. Nieves Franco, directora Comercial de Arsys, la máxima responsable de esta compañía que forma parte del Grupo United Internet y que lidera el mercado español de soluciones de internet para empresas y profesionales IT, mantiene que los españoles somos, sobre todo los jóvenes, muy buenos usuarios de las nuevas tecnologías, pero aún nos falta saber cómo adaptarlas a los negocios.

– ¿Cómo ve el proceso de transformación digital de la empresa española?

– Aquí, en Arsys, tenemos una visión global del mercado porque nuestra oferta de servicios está dirigida tanto a la pequeña y mediana como a las grandes corporaciones. Continúa siendo una asignatura pendiente, pues claramente hay diferencia de velocidades. Las grandes están entendiendo cómo incorporar la tecnología a sus negocios y, lógicamente, están mutando. Mientras que en las pymes no es así, falta formación y conocimiento sobre su aplicación. No se ha sabido explicar cómo introducirla y sacarle partido.

– ¿Qué ha frenado más el desarrollo tecnológico en España: la reciente recesión económica o determinadas mentalidades?

– Problema de mentalidad, no. Hay grandes emprendedores, pero no hemos sabido hacerles ver cómo aplicarla y cuál puede ser el impacto en su negocio.

– ¿A qué se debe esa carencia?

– La atomización de las empresas requiere un mayor esfuerzo para llegar a ellas. No es un problemas de entendederas ni de explicaderas, sino de distribución de la información. No está llegando a las pymes el mensaje de la necesidad de la digitalización.

– ¿Esa insensibilidad tiene culpables?

– Es un problema de todos. La responsabilidad empieza por la Administración en los primeros estadios educativos. Es cierto que las nuevas generaciones, conforme se van incorporando al mercado, le dan otra impronta porque tienen una mentalidad distinta, pero eso no quiere decir que sepan cómo impacta una transformación digital en los negocios o cómo ponerla en práctica.

– ¿Nuestro nivel tecnológico sería mayor si no hubiera habido crisis?

– La revolución y la transformación digital en España viene impulsada en parte por la crisis. La necesidad de eficiencia ha sido propiciada por ella, a pesar de que ha ralentizado inversiones. Ciertamente, determinados sistemas y procesos obsoletos se han mantenido por falta de recursos, pero ha favorecido todos aquellos cambios en los que la tecnología de forma palpable –como el «cloud computing»– facilita la reducción de costes y la optimización de los medios.

– ¿Es adecuada la estrategia de la empresa española en inversión tecnológica?

– No sólo hay una empresa española, hay muchas. Estamos bastante acostumbrados a invertir en función de las subvenciones y las ayudas fiscales. El papel dinamizador de la Administración ha sido decisivo. La transformación digital parte de entender la manera de acercarse a un mercado cambiante y cómo adaptarse al mismo.

– ¿Qué tecnologías son las menos empleadas en España?

– Somos pioneros en movilidad. En cambio, el 99% de las empresas no pueden utilizar el «big data» no porque carezcan de los recursos tecnológicos o no puedan acceder a ellos, sino porque previamente no saben qué información es relevante para su negocio. Se nos llena la boca con el «data» y el «business intelligence», pero no estamos preparados y necesitamos adoptarlos. De todas maneras, lo más importante es entender que la tecnología se comparte. No sólo la infraestructura física, sino el conocimiento. Los empresarios deben asumir que hay mucha gente con experiencia a la que se debe mirar.

– ¿Echa de menos una mayor formación de tecnología en los escolares? ¿Pondría asignaturas de esta materia en los escolares?

– Lo que realmente se echa de menos en el sistema educativo es la formación en gestión empresarial. Ésta es la que marca la diferencia entre un emprendedor y una persona que no lo es. Los jóvenes utilizan muy bien la tecnología, pero no le sacarán partido si no tienen cualificación empresarial.

– ¿Falta en nuestro tejido productivo profesionales altamente cualificados?

– La oportunidad de empleabilidad es enorme, si somos capaces de formar a los jóvenes. Hay que adaptar los planes de educación primaria, secundaria y superior, y de formación profesional, a esos nichos.

– ¿En que es distinta Arsys desde que fue adquirida por United Internet?

– Nuestra dimensión y capacidad de innovación son radicalmente distintas, sin haber perdido, y se lo debemos agradecer a la empresa matriz, nuestra esencia, ni nuestra marca, ni nuestros valores.

¿Cuáles son los retos de Arsys?

– Crecer. Tenemos un papel que jugar en la obligada transformación «cloud» de la empresa en todos los niveles. Ya hemos superado el tiempo de prueba y nos encontramos con proyectos complejos en los que damos mucha seguridad y flexibilidad. Los ahorros que consiguen las empresas son brutales.

Dos profesores de Logroño

Arsys fue fundada en 1996 por dos profesores de Logroño. Con sede en la capital riojana, además de Madrid y Barcelona, sus banderas siempre han sido la innovación, la especialización-experiencia y la atención al cliente. Convertida en filial del Grupo United Internet en 2013, no ha perdido ni su esencia ni sus valores. Pionera en «cloud computing», desarrolló la primera plataforma comercial de «cloud hosting» alojada en Europa. Sus datos son relevantes: 266.000 clientes, más de 300 empleados, tres centros de datos en nuestro país y nodos «cloud» en EE UU, Inglaterra y Alemania… 765.000 dominios gestionados.

EL PERFIL

Aunque su cargo es el de directora Comercial, su misión es mucho más amplia. Nieves Franco es la encargada de coordinar la expansión y consolidación de Arsys y definir su estrategia comercial. Licenciada en Ciencias Económicas por la Universidad Autónoma de Madrid, –más tarde, realizó un Programa de Desarrollo Directivo (PDD) en el IESE–, trabaja en la empresa con sede en Logroño desde hace 17 años. Antes ocupó diferentes cargos directivos en la consultora élogos y en la operadora ONO.

Source: The PPP Economy

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