El Gobierno subirá las pensiones de viudedad un 8% en dos años
Después de aprobar la subida del salario mínimo acordada con los interlocutores sociales, el Gobierno tiene previsto poner en marcha en breve otra medida de claro corte social: el incremento de las pensiones de viudedad. En concreto, incrementará la base reguladora que se utiliza para calcular esta prestación desde el 52% en que se encuentra actualmente hasta el 60%. ¿Cuánto se elevarán entonces estas pensiones? Dependerá de la situación laboral del fallecido en la fecha en la que se produzca el óbito y de la causa del mismo, así como las cargas familiares y del nivel de ingresos que tenga el beneficiario.
La historia de esta subida es la crónica de un incremento anunciado y no aplicado hasta ahora. La última reforma de las pensiones, de 2011, ya establecía en una disposición adicional de la ley que le dio forma que estas prestaciones irían mejorando de manera progresiva a partir del 1 de enero de 2012. La norma fijaba un plazo de ocho años para ello.
Las razones del retraso, aunque dentro de ese plazo marcado, para aprobar el alza radican en el elevado coste de la medida –alrededor de 1.300 millones de euros–, según informó a los sindicatos el secretario de Estado de la Seguridad Social, Tomás Burgos, y en el difícil estado de las cuentas públicas los pasados años, por el azote de la crisis económica y la obligatoriedad de cumplir los objetivos de estabilidad presupuestaria pactados con la Unión Europea, según los motivos que esgrime el Gobierno.
¿Y cómo subirán estas bases reguladoras? De acuerdo con el último borrador del proyecto de real decreto que materializará las subidas, al que ha tenido acceso LA RAZÓN, «se procederá al incremento del 1% de las pensiones de viudedad que cumplan con los requisitos establecidos» en la norma, mientras que «el porcentaje restante hasta alcanzar el 60% se incrementará a partir del 1 de enero de 2019».
El alza, sin embargo, no afectará a todo el colectivo. De acuerdo con el artículo 1 del texto, referido al ámbito de aplicación, se aplicará a los beneficiarios de la pensión de viudedad del sistema de la Seguridad Social que cumplan los requisitos de haber cumplido una edad igual o superior a los 65 años, no tener derecho a otra pensión pública española o extranjera, no percibir ingresos por la realización de trabajo, ya sea por cuenta propia o ajena, y «no percibir rendimientos del capital, de actividades económicas o ganancias patrimoniales, de acuerdo con el concepto establecido para dichas rentas en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas, que en cómputo anual superen el límite de ingresos establecido en la correspondiente Ley de Presupuestos Generales del Estado para ser beneficiario de la pensión mínima de viudedad».
El texto elaborado por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social remarca que cuando se cumplan esos requisitos, «el importe de la pensión de viudedad se determinará aplicando a la base reguladora que corresponda el porcentaje del 60%».
Asimismo, subraya que cuando se produzca la pérdida de alguno de esos requisitos el porcentaje para calcular la pensión volverá a bajar al 52%. Con el fin de evitar situaciones de picaresca, la entidad gestora de la Seguridad Social podrá requerir «en todo momento» a los beneficiarios una declaración de sus ingresos, así como de sus bienes patrimoniales y, en su caso, «la aportación de las declaraciones tributarias presentadas». Las exigencias incluidas en la norma que tiene previsto aprobar el Gobierno excluyen a un alto número de potenciales beneficiarios de la subida.
En principio, por ejemplo, y salvo cambios de última hora, las pensiones que necesitan de un complemento para llegar a una cantidad mínima no se verán beneficiadas, ya que el incremento que se produzca por un lado será reducido de la parte complementada. En diciembre del pasado ejercicio, 740.337 pensiones, incluían ese complemento de mínimos, lo que representa un 30,5% de todas las pensiones de viudedad.
Segunda mayor pensión
En la actualidad, España cuenta con 2,365 millones de personas que perciben pensión de viudedad, una cifra que se mantiene equilibrada desde 2010 en el entorno de los 2,3 millones de pensiones, lo que la convierte en la segunda más numerosa tras las 5,8 millones de pensiones de jubilación. La nómina actual supone un importe global de 1.535 millones de euros mensuales, según los datos sobre pensiones de la Seguridad Social del Ministerio de Empleo correspondientes al pasado diciembre.
Del total de pensionistas que reciben esta prestación, 2,183 millones son mujeres (el 92%) y 181.789 son hombres (el 7,7%). Las primeras reciben una retribución media de 662,73 euros, mientras que los segundos cobran 486,54 euros.
En el conjunto, la pensión media por este tipo de situaciónes de 649,19 euros. Frente a ello, la pensión media general en España llega a los 926,87 euros, mientras que la de jubilación esde 1.071,01 euros. En lo que se refiere al número, éste ha crecido en algo más de 125.000 en una década, desde los 2,24 millones que se contabilizaban en 2007, justo en el origen de la crisis económica.
Source: The PPP Economy