Los hospitales privados incrementaron un 6% su plantilla a pesar de las dificultades por la pandemia
La sanidad privada afrontó dificultades extremas con «una merma de actividad ordinaria inédita y atendiendo sobrecostos extraordinarios relacionados con el Covid-19», según se desprende del barómetro presentado hoy por la Alianza de la Sanidad Privada Española. Aunque no se ofrecieron datos de facturación de 2020, los portavoces de los hospitales privados refirieron que este sector se vio inmerso «en la mayor prueba de estrés jamás sufrida».
A pesar de ello, el 62% del total de centros privados incrementaron en 2020 sus plantillas un 6% respecto al año precedente, e incorporaron 5.000 nuevos profesionales, tanto sanitarios (73%) como no sanitarios (27%). Además, el 99% de los hospitales generales privados no recurrieron a ERE y el 94% no realizó ningún ERTE.
Por otro lado, los hospitales generales privados han invertido un 312% más en productos relacionados con la protección de los profesionales, en un contexto de hiperinflación que supuso pagar un promedio de un 1.100% más en el precio de las mascarillas en 2020 frente a 2019. Los centros que se vieron obligados a invertir más en protección de sus profesionales corresponden a comunidades como Castilla y León, Comunidad Valenciana y Andalucía.
Reclaman más colaboración
Desde el sector de la sanidad privada insisten en que no han dejado de tender la mano al Ministerio de Sanidad y a las consejerías autonómicas. «Lamentamos no haber visto en algunos gestores públicos la misma predisposición que hemos mostrado nosotros a contribuir más con nuestras capacidades en los momentos críticos que hemos vivido y aún vivimos, además de no compensar a nuestros hospitales por el esfuerzo realizado, algo insólito tras una expropiación temporal de infraestructuras y recursos humanos», señaló el presidente de la patronal ASPE, Carlos Rus.
«La sanidad privada, como parte del SNS, debería estar representada en sus órganos de gobernanza, como el Consejo Interterritorial o el grupo de trabajo de la estrategia de vacunación, por citar ejemplos», añadió Rus.
Actividad asistencial
Del informe también se extrae que toda las áreas asistenciales de la sanidad privada se vieron afectadas a lo largo del año pasado: las intervenciones quirúrgicas descendieron un 14%; las urgencias un 26%; las consultas externas un 9%; los ingresos hospitalarios un 14%; y los ingresos UCI un 16%.
A pesar de ello, la actividad de la sanidad privada en la atención de pacientes Covid fue intensa con uno de cada tres pacientes hospitalizados fueron atendidos en centros privados durante 2020 .En total, se registraron 63.246 hospitalizados (30%) sobre el conjunto de los 211.064 recogidos en la actualización 282 del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad. Las regiones donde se atendieron más ingresos hospitalarios en la privada frente al total de su comunidad autónoma fueron Baleares (26%), Cataluña (24%) y Andalucía (16%).
Asimismo, el 29% de los afectados que hasta el 31 de diciembre de 2020 han requerido asistencia en UCI fueron asistidos en la privada (5.256 pacientes sobre 18.251). Los territorios donde se atendieron más ingresos en UCI en la sanidad privada con respecto al total de su comunidad autónoma fueron Cataluña (25%), Andalucía (17%) y Comunidad Valencia (15%).