La lucha de Amazon contra el fraude: incautó más de dos millones de falsificaciones en 2020
La explosión del comercio electrónico durante la pandemia también tiene su lado oscuro, el de las falsificaciones y fraudes en las compraventas por internet. Unas malas prácticas contra las que Amazon ha redoblado sus esfuerzos este último año para erradicarlas. En concreto, según un informe de la mutinacional de comercio electrónico, al que ha tenido acceso ABC, revela que en el último año invirtió más de 700 millones de dólares y dio empleo a más de 10.000 personas para para proteger a sus clientes contra los fraudes y las malas prácticas.
Fruto de esta inversión, el pasado año Amazon incautó un total de dos millones de productos falsos en sus almacenes logísticos antes de ser enviados a los compradores. Además, paralizó más de 6 millones de intentos de crear cuentas de vendedor fraudulentas, impidiendo que los potenciales infractores pudiesen publicar un solo producto para su venta y bloqueó más de 10.000 millones de descripciones de producto sospechosas antes de que se publicaran en sus páginas web. Según el informe, tan solo el 6% de los intentos de registro de marca pasaron los procesos de verificación de la multinacional.
En conversación con ABC, la vicepresidenta de protección de marca de Amazon, Mary Beth Westmoreland, destaca que con la pandemia los intentos de fraude se intensificaron. «A medida que más gente compra online también hay más actores malintencionados que tratan de aprovecharse de ello. Durante la pandemia vimos intentos de crear páginas de productos falsificados vinculados a la pandemia. Por ejemplo, mascarillas faciales engañosas. Detectamos un aumento de los intentos por crear nuevas cuentas, crear nuevas páginas de producto o modificar descripciones de producto», explica.
Varias son las herramientas que utiliza Amazon, y que pone a disposición de las empresas, ya sean pequeñas, medianas o grandes, para evitar la venta de productos falsificados. Una de ellas es el registro de marca, con la que las empresas pueden proteger su propiedad intelectual de forma gratuita. En esta herramienta hubo más de 500.000 altas en 2020.
Otra arma para luchar contra las falsificaciones en el programa Amazon Transparency, un servicio de serialización del producto de forma individual. El vendedor etiqueta el producto con un código, que tiene un coste de 4,5 céntimos de euros, y que sirve para que tanto Amazon como el comprador puedan verificar que es el producto seleccionado. En total, más de 15.000 marcas usan ya este servicio. Una de las empresas que lo utiliza es la española DXIII DELUXE13, especializada en productos de bienestar. En conversación con ABC explican que ha sido una herramienta fácil de utilizar y que les ha servido para ofrecer una mayor confianza al cliente.
Por último, destaca el project zero, que dota de poder a las marcas para proteger su propiedad intelectual. En concreto, con este servicio, que usan unas 18.000 empresas, se puede eliminar anuncios de la propia tienda de Amazon. Además, también da la opción de serializar los productos con un código único.