La CEOE avisa de que más impuestos lastrarán la competitividad, la inversión, el empleo y los salarios


Menos competitividad, menos inversión, menos empleo y salarios más bajos. Esas serán las consecuencias que traerá una subida de impuestos como la anunciada por el Gobierno de Pedro Sánchez, según ha advertido hoy la CEOE. La patronal, que ya advirtió la semana pasada de que esta subida tributaria podría afectar a los salarios, ha añadido hoy otra serie de efectos negativos que, a su juicio, acarreará el incremento de la carga fiscal que proyecta Sánchez para las empresas. Aunque su presidente, Juan Rosell, ha advertido que la magnitud de los efectos dependerá de qué impuestos se toquen y cómo se toquen, sí que ha avisado de que, de forma genérica, «si hubiese un incremento de impuestos repercutiría en el beneficio de las empresas, que tendrían que ver entonces las cosas con una visión diferente». Ese cambio de visión afectaría a todo, ha advertido Rosell: empleo, salarios, inversión…

Rosell ha presentado el informe «La Tributación Empresarial» para defender que, contrariamente a lo que propugna el Gobierno, las compañías españolas soportan una carga tributaria muy elevada. Tan alta que, según ha recordado, tienen un tipo real del 46,9% sobre beneficios, frente al 40,9% de la media de la UE, como recoge el informe «Paying Taxes», del Banco Mundial y PwC. Las empresas españolas, además, aportan el 30,4% del total de los ingresos públicos, frente al 26,2% de la media de la UE, según los datos de Eurostat. En cuanto al impuesto de sociedades, que Sánchez quiere que sea de al menos un 15% en el caso de los grandes conglomerados, Rosell ha recordado que, según datos de la Agencia Tributaria, la base imponible media es del 22,5%, y no del 12%, cómo ha dicho el Gobierno. «Si fuera verdad lo que se dice de que las grandes empresas pagan pocos impuestos en España, todas se domiciliarían en España», ha dicho Rosell.

Sí incrementar la carga impositiva no es la solución para aumentar la recaudación, ¿cuál es? Para la CEOE, por el lado de los ingresos, habría que incentivar la actividad para mejorar la recaudación y combatir la economía sumergida. Destapar solo un 5% de la misma permitiría aflorar 35.000 millones de euros. Por el lado del gasto, los esfuerzos deben centrarse para los empresarios en reducir el exceso de duplicidades administrativas, apostar por la digitalización para hacer las administraciones más eficientes o combatir de forma decidida el fraude del absentismo laboral.

Source: The PPP Economy

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